Revista de Educación Fundación Convivencia N.8
Saberes sobre Convivencia
1 de mayo de 2015
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Editorial
De manera que nuestra propuesta con la edición de este número se direcciona en estas tres formas: “dominio” (o derecho a hablar), “sujeto” y “campo”; que a su vez ofrecen tres posibilidades para amplificar las miradas sobre la convivencia. El ejercicio de asumir la convivencia como “saber”, y no como un objeto instrumentalizado e introducido a la escuela (como si de esto la escuela careciera), nos ha
posibilitado encontrar otras figuras y conexiones que al parecer han permanecido invisibles, como lo es la potencial relación entre convivencia, literatura y pedagogía.
La infancia recuperada a través de juegos, tradiciones y costumbres
Autor: Celmira Torres Hurtado
Este artículo se centra en dar a conocer el proyecto: la infancia recuperada a través de juegos tradiciones y costumbres que se desarrolla en el colegio Unión Europea de Bogotá con los estudiantes de cuarto grado de la jornada tarde.
La finalidad del texto es mostrar algunas peculiaridades en las dinámicas educativas, que potencializan los procesos de aprendizaje y convivencia en la escuela con la inclusión de padres, estudiantes y docentes. Para ello, se narran varias experiencias pedagógicas que han permitido mejorar de manera significativa y positiva las relaciones con el conocimiento y con los otros.
De este trabajo se desprende que muchas de las actuaciones que realizamos en las escuelas por más sencillas que parezcan requieren del apoyo, participación e inclusión de todos los actores que intervienen en el proceso educativo.
Maestros que cuentan Un compromiso con arte de soñar
Autor: Ruth Albarracín Barreto
Creo que empecé mi formación desde la barriguita, con mi mamá, quien luego me llevó de niña a visitar las cárceles de militares. Crecí haciendo poesía, ayudando a realizar campañas y a recoger dinero para los hijos de los presos de Melgar, pues no tenían todo lo digno.
Mi papá fue pensionado de la Armada, veterano de La guerra de Corea. Murió peleando por sus derechos, pues a quienes estuvieron en los enfrentamientos no les dieron “nada digno”, y solo hasta hace poco les hicieron un reconocimiento del cual no gozo. Esa lucha de los derechos de mi mamá y mi papá me
enseñó el sentido colectivo de la vida.
Bárcena, F. &Melich, J.C. (2014). “Una pedagogía de la radical novedad”. En: La educación como acontecimiento ético. Natalidad, narración y hospitalidad. Pp. 19-70 Madrid:Miño y Dávila, Editores.
Autor: Eduardo Valenzuela Echeverri
El texto sobre el cual escribo esta reseña vio la luz hace ya más de una década, en el 2000 específicamente. Sus autores bien lo saben y no buscan con esta reedición replicar simplemente lo consignado hace ya tantos años. Esta nueva entrega, aunque fiel en esencia al ensayo original que la precede, revela un semblante diferente, una fisonomía distinta a la del primer escrito hoy sometido, en palabras de sus propios autores, “a un proceso de aseo”, pulimento que le viene bastante bien en virtud del valioso haber intelectual alcanzado a través de estos últimos años por Bárcena y Melich, quienes reescriben el texto confiados en poder esclarecer parajes del manuscrito original que ahora, a juicio suyo, consideran confusos e incluso estériles.
Su iniciativa por supuesto que nos reporta importantes réditos, ya que consiguen ofrendarnos un texto robustecido y sólido, cuyo discurso reinventa y deconstruye aquella manera habitual de leer la acción educativa como simple aculturación.
Propósito al que, de hecho, dedican el capítulo introductorio del libro, titulado Una pedagogía de la radical novedad, texto por cuya fuerza y relevancia para la filosofía de la educación y el escenario ético de la formación y la convivencia he decido específicamente referenciar en esta breve reseña.
Entre historias, teatro y convivencia.
Autor: Shirley Catherinne Horta Acero
El Proyecto de Comunicación y Expresión Canadá Triumph se constituye en un proceso que permite a los estudiantes expresar sus sentimientos y sus vivencias por medio del teatro, para desde allí verse a sí mismos y lograr cambios en beneficio de su desarrollo personal o social, entre otros.
Hemos decidido llamar a este número “Saberes sobre convivencia”. Pero debemos aclarar de antemano que esta nominación no obedece a una cuestión casual, ni insertada en las tendencias novedosas para llamar las cosas de modo exótico. Cuando decimos “saber” en términos de “convivencia”, nos estamos refiriendo a una postura política en las enunciaciones; postura que puede llegar a tener tres
efectos: por un lado un efecto de poder - que como lo había establecido Michel Foucault - se trata del “dominio” o del poder hablar de “una práctica discursiva que así se encuentra especificada” (Foucault, 1979). Un segundo efecto sería el sujeto, y aquí el saber sobre convivencia se constituye en el espacio en el que “el sujeto puede tomar posición para hablar de los objetos de que trata su discurso”
(Foucault, 1979), así las distintas posturas, las miradas, las interrogaciones, las reflexiones filosóficas o pedagógicas sobre la convivencia que los sujetos hacen adquirirían sentido y validez. Y un tercer efecto, tendría la intención de descubrir si ya existe (fundarlo si no) un campo de discusión, la invitación a mirar la convivencia como ese lugar de “coordinación y de subordinación” (Foucault, 1979) de los enunciados; que sea capaz de revelar las apropiaciones imperantes en lo que se dice al respecto, y amplificar las voces para la transformación de sus enunciaciones, y sus usos.
